Dos pueblecitos sorianos construirán un embalse
"Soria I. Dos pueblecitos sorianos, Blacos y Torreblacos, de unos 250 habitantes cada uno, proyectan la construcción de un embalse en el término municipal del primero de ellos, con el fin de convertir en regadío una extensión de tierras llanas muy productivas que hoy dedican íntegramente a cultivos de secano. Para la construcción de este embalse que beneficiaria a cinco pueblos sorianos, Blacos, Torreblacos, Valdealvillo, Santiuste y Torralba del Burgo, se han iniciado las oportunas gestiones. La toma de agua se efectuaría del rio Abión, primer rio truchero de la provincia de Soria, cuyo caudal apenas sufre los efectos del estiaje, y el embalse puede construirse en un paraje donde no afecta cultivo alguno. –Cifra."
Vista la noticia, ¿Quién puede pensar que en aquellos años no había visionarios en Blacos y Torreblacos?, yo no lo dudo, queda claro que ya en aquel entonces intentaban mejorar la producción agrícola y la idea no era mala, aprovechaban el desfiladero de trambasaguas y convertirían la vega en un espectáculo de aspersores, pero claro solo había dos problemas: 1. Financiación 2. Climatología.Seguir leyendo, pulsar: "más información"
Además, hubiese traído este embalse múltiples beneficios a la zona, turismo, es sabido que donde hay un embalse y más de aguas nítidas llega el turismo, generación eléctrica y regalías a los pueblos afectados, hubiese sido menor la emigración, los pueblos de Blacos y la Torre estarían más cuidados y ampliados, etc.
Pero visto desde hoy, el rio Abión en julio y agosto da pena, tramos secos en el término de Blacos y caudales exiguos en el resto, precisamente en trambasaguas he visto tramos completamemte secos y los peces y cangrejos ahogándose en el agua estancada. La culpa esta clara, la sobreexplotación del acuífero por los criaderos de trufas, que aun siendo ricas y sabrosas no reportan ningún beneficio a nadie de la zona, solo a cuatro empresas especuladoras a las cuales la ecología les trae sin cuidado y no digamos de los políticos y técnicos que permitieron esa sobre explotación del acuífero.
Llama también la atención del artículo los 250 habitantes en cada pueblo, nada más y nada menos que 500 almas viviendo entre ambos, no como hoy que a duras penas llegan a las tres docenas.
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